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| El sacerdote bendiciendo los ramos |
24 de marzo de 2024
El Domingo de Ramos lo recibimos con buena temperatura, nubes y soles. Buen día para procesionar y estrenar la prenda que cada uno elija, yo, unos calcetines. La llamada de las campanas no ha tenido excesivo eco. La respuesta digamos que ha sido digna, pero mejorable. Es lo que hay, y eso que tenemos al entusiasta
Grupo de Tambores que le dan más relevancia al acto. Puntualmente nos juntamos a las puertas de la iglesia y después de la bendición de los ramos comenzamos la procesión. Procesión corta y por la parte llana. No bajamos ni subimos pechos. Vamos hasta el puente romanao y vuelta a la iglesia donde se celebra la misa, con la lectura de la pasión de Cristo leída por tres personas, y la intervención del Coro Parroquial.
Después de misa, toca vermú. Como se sale pronto, el alterne se hace largo, pero nosotros podemos con eso y con más.
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