Buen provecho |
11 de febrero de 2021
Jueves de Todos del año pasado fue una de las últimas fiestas que pudimos celebrar con la tan añorada normalidad. Después, todos sabemos lo que pasó con la Semana Santa, San Vitores de mayo y resto de festividades.
El 2021 ha empezado igual que despedimos el 2020 y andamos en plena tercera ola, algunos dicen que está empezando la cuarta. En fin, se no está haciendo largo.
Por lo menos Jueves de Todos es una de las fiestas que se puede celebrar en casa con bastante dignidad. Algunos añorarán la cena con los amigos o familia más amplia, pero bueno, la fiesta en sí no sufre mucho.
Una buena y suculenta cena con los platos propios del día: excelente tortilla de patata, suculento escabeche con cebollita y guindillones picacaditos y para darle un poco aire calceatense un buen preñado, todo ello regado con un buen vino de Rioja. Y como remate unas espectaculares torrijas.
La verdad es que con alimentos sencillos se puede hacer una cena de lo más suculenta, que no tiene nada que envidiar a otros platos con más pedigrí.
Por lo menos Jueves de Todos es una de las fiestas que se puede celebrar en casa con bastante dignidad. Algunos añorarán la cena con los amigos o familia más amplia, pero bueno, la fiesta en sí no sufre mucho.
Una buena y suculenta cena con los platos propios del día: excelente tortilla de patata, suculento escabeche con cebollita y guindillones picacaditos y para darle un poco aire calceatense un buen preñado, todo ello regado con un buen vino de Rioja. Y como remate unas espectaculares torrijas.
La verdad es que con alimentos sencillos se puede hacer una cena de lo más suculenta, que no tiene nada que envidiar a otros platos con más pedigrí.
Fotos mías y otras enviadas al Facebook de Cerezo en blanco y negro por muchos cerezanos.
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